Se centra  en el estudio de los suelos regionales, específicamente en las arcillas expansivas, los áridos patagónicos y su potencialidad a la reacción álcali-agregado y caracterización del comportamiento de hormigones con incorporación de aguas residuales.

Estudio del acoplamiento termo-hidro-mecánico de los reservorios geológicos que demuestran la viabilidad de futuros proyectos y que cuantifique, con criterios objetivos y uniformes, el riesgo que estos proyectos imponen al medio ambiente.